Con una cuidada y esmerada selección de nuestro ganado, algunos con estándares de calidad tan exigentes como el Comité de Agricultura Ecológica o la Denominación de Origen Protegida, empieza nuestra labor, aunando tradición y tecnología, preservando la pureza y la calidad. Nuestros productos se elaboran dentro de unos de los bosques más emblemáticos de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, cuyo clima y condiciones ambientales facilitan la curación de nuestros productos, en un pausado, lento y silencioso proceso de elaboración artesanal, haciendo que la naturaleza determine unos productos únicos en el mundo entero, con una textura y calidad iniguables.  El oficio transmitido de generación en generación y la maestría y pasión de nuestros artesanos constituyen el secreto de esa obra de arte que son nuestros jamones y embutidos.